Por María Laura García
Una autoestima saludable, que no es otra cosa que visualizarnos de una manera más amable o positiva, nos ayudará a mantener un balance emocional que mantendrá nuestro cuerpo protegido ante los embates mentales que atentan, contra nuestro sistema de defensas o sistema inmunológico.
La autoestima está constituida por un conjunto de percepciones, pensamientos y sentimientos sobre nosotros mismos que, en pocas palabras, es un tipo de autovaloración constante. Son creencias que vamos desarrollando a lo largo de nuestra vida a través de mensajes que recibimos del exterior.
La infancia, por ejemplo, es una etapa valiosa en la cual se forma la autoestima, ya que sienta las bases de nuestras creencias; sin embargo, existen casos en los que esta etapa, es la que deteriora nuestro autoconcepto.
De hecho, tendemos a disminuirnos y no valorarnos, pues desde chiquitos el ambiente familiar o escolar a través de muchas circunstancias nos lleva a no sentirnos dotados, capaces, estimados y/o queridos.
Pudiera citar mil ejemplos de cómo nuestra estima, o no se construye o se debilita a través de los “ataques” del entorno, pero para que este encuentro de hoy no se haga muy largo, me senté sólo a escribir sobre cuáles son esos signos que revelan una baja autoestima en nosotros y cómo podemos mejorarla, ya sea por nuestros propios medios o buscando ayuda.
Atención, solo podemos mejorar la opinión de nosotros si comenzamos por analizar aquello que pudo resquebrajarnos mentalmente.
¿Por qué cultivar mi amor propio?
Mejorar nuestra estima nos lleva a sentirnos plenos y satisfechos con nosotros, por ende, seremos mejor percibidos y dejaremos de ser vulnerables a las miserias y falta de crecimiento emocional de otros. Además, es una de las bases para mejorar nuestro estilo de vida y con ello nuestra salud física.
¿No te aprecias mucho? ¡Señales de alarma!
Algunos puntos a considerar para detectar si padeces de baja autoestima, son:
- No te sientes seguro y por tanto dejas de accionar de diversas maneras, es decir, no tomas la iniciativa, no te comunicas, no sales, no tomas partido. Por ejemplo, no expresas tus opiniones por miedo a ser rechazado o porque sientes que tus ideas no tienen el mismo valor que las de otros.
- Muchas veces, asumes que no mereces las cosas buenas de la vida.
- Te preocupas y ocupas permanentemente en buscar la aprobación de los demás para hacer las cosas o sentirte mejor.
- No te atreves a luchar por tus sueños porque te sientes minusválido para lograrlos.
- Percibes a otros como si fuesen superiores a ti y quieres ser como ellos, sin entender que todos somos distintos y tenemos virtudes más capacidades a aprovechar. Esto sucede porque tendemos a atribuir los logros a factores externos y los fracasos a defectos o carencias internas.
- Permanentemente te sientes insatisfecho con lo que haces y crees, todo el tiempo, que lo pudiste o puedes hacer mejor.
- Vives infeliz, creyéndote culpable o poco atractivo; es decir, te la pasas pensando en tus debilidades sin considerar tus cualidades.
- Por todo lo anterior, te cuesta tomar decisiones porque piensas que tu elección siempre será la incorrecta, y por consiguiente, te resulta más cómodo seguir las decisiones de los demás.
Si te identificas con lo que escribí, es hora de trabajar tu autoconcepto y amor propio.
Descubre la forma en la que podrías mejorar tu autoestima...
Cultivar la autoestima debe ser una estrategia de vida y yo me he convertido en una experta, por tanto, les voy a dar mis truquitos para que los pongan en práctica. Y cuidado, esta es una labor o tarea diaria, Nunca debe dejar de hacerse. Toma nota:
- Lo primero es mantener la mente ocupada con pensamientos positivos sobre ti mismo y tu entorno. Esto te permitirá comenzar a desarrollar confianza en ti, porque no existe otra persona igual que tú en el planeta. Los especialistas recomiendan confiar en ti mismo y por los buenos resultados, tu entorno lo notará de inmediato.
- Ten muy claro cuáles son tus habilidades, talentos y defectos. Eso te ayudará dedicarte a lo idóneo y no esperar imposible. Se tú y no trates de parecerte a nadie, solo busca ser tu mejor versión. No seas inconforme y acéptate tal cual eres.
- Ponte metas realistas y siempre a corto plazo. Enfócate en trabajar para alcanzarlas y establece un plan de acción; e incluso si notas que te faltan herramientas busca formarte en lo que careces para concretar tus aspiraciones. Entonces, será indispensable adoptar la actitud del «Yo Puedo».
- Ten presente que ser realistas implica también solicitar ayuda y aceptarla. Eso no te hace menos, porque la vida esta hecha en su totalidad para “trabajar en equipo”.
- Si puedes toma nota de tus pequeños logros o sobre lo positivo que hagas diariamente pues te permitirá evaluarte periódicamente y poder sentirte bien o efectivo con tus avances.
Todo lo anterior, me ha permitido no sólo a avanzar y alcanzar lo que me propongo, sino también a fortalecer mi autoestima y amor propio. Además, que sea “a prueba de balas” y resista a toda esa gente tóxica que está a nuestro alrededor y que se ocupa permanentemente de vulnerarnos y desacreditarnos.
REDES:
Instagram: @ATuSalud
YouTube: ATuSaludconMariaLauraGarcia
Facebook: ATuSaludEnLinea
Twitter: ATuSaludEnLinea
Caraota Digital no se hace responsable por las opiniones, calificaciones y conceptos emitidos en las columnas de opinión publicadas en este medio.